-Quieren que me aleje de ti.
-¿Les vas a hacer caso a Amber
y su grupito?
-¿Tengo opción?
-Siempre hay otra opción.
-¿Y cuál es?
-Plántales cara.
-Cómo se nota que no me conoces
-digo sonriendo.
-En ese caso déjame hacerlo.
-Te costará -le prevengo.
-Resistiré -dice seguro de si
mismo- ¿quieres que vayamos al jardín de las maravillas para hacer
el trabajo?
-¿A dónde? -pregunto confusa.
-Así es como lo llamo yo, el
jardín del centro comercial -me aclara- ¿cómo lo llamas tú?
-No le he puesto un nombre, me
limito a decir que es mi mundo aparte, bueno ni siquiera le he
contado a nadie que me gusta ir allí.
-Has visto, poco a poco confías
en mí -dice con superioridad, eso me hace reír.
-No me has dado opción a
ocultarte ese lado de mí.
-¿Por qué lo hubieras
ocultado?
-Oculto todo a todos, no te lo
tomes a mal.
-¿Hasta a tus padres?
-Ese tema es... complicado -digo
buscando la palabra exacta.
-Creo que es suficiente por hoy
¿vamos a ese mundo aparte del que hemos hablado?
-Claro.
Cuando salimos de su habitación
Sam me guía hasta el aparcamiento y se sitúa al lado de una moto
negra, saca un par de cascos y me ofrece uno de ellos.
-Póntelo.
-Yo... -me aterra decirle que
nunca he ido en moto y mucho más que les tengo pavor.
-¿Pasa algo? -pregunta.
-Nunca he ido en moto -digo
agachado la cabeza y cerrando los ojos.
-¿Y qué? Ni que te hubiera
pedido que condujeras, no debes hacer una montaña de un grano de
arena -noto el casco sobre mi cabeza y Samuel lo presiona con
delicadeza para ponérmelo- no pasará nada, confía en mí.
Se pone su casco y me tiende una
mano al ver que sigo dudando, “¿cuántas oportunidades más
quieres para encajar?” me digo a mi misma. Cojo aire y me acerco a
la moto, paso una pierna por encima del sillín y me impulso un poco
para acabar de subirme.
-Agárrate bien -me dice Samuel
antes de arrancar la moto. Rodeo su cintura con mis brazos tan fuerte
como puedo y al notar como nos empezamos a mover mis piernas también
se aprietan contra las suyas.
Cuando llegamos al centro
comercial me bajo de la moto y le entrego el casco a Sam. Entramos en
el jardín de las maravillas y nos tumbamos sobre su césped.
-Empecemos con cosas básicas
-dice Samuel.
-¿Color favorito? -pregunto
cuando veo que no sabe por donde empezar.
-Naranja ¿tú?
-Azul turquesa.
-Al parecer uno en camino ¿tú?
-No, no pareces muy emocionada.
-Es que no me lo esperaba.
-¿Tienes mascotas? -pregunta
Sam cambiando de tema.
-Tenía un perro, pero lo tuve
que dar por motivos alérgicos ¿y tú?
-¿Cuenta la novia de mi padre?
-dice muy serio
-No.
-Pues entonces un gato y un
perro.
-¿Tan mal te cae?
-No la conoces.
-Razón por la que estás en la
residencia.
-Mis padres viajan demasiado.
-Le das demasiadas vueltas a
todo.
-Tengo demasiado tiempo libre
-Sam ríe y hace que me pregunte qué he dicho que le ha resultado
tan gracioso.
-¿Te gusta nadar?
-Adoro la natación.
-¿Por qué no te apuntas?
-¿Tú vas a natación?
-Más o menos, soy el
socorrista, mis padres quieren que tenga un trabajo con el que ocupar
mi tiempo libre y ganarme el dinero.
-Yo lo tengo por gusto -pienso
en que en el Starbucks doy mi salario al bote de propinas ya que lo vería muy
injusto.
-¿Dónde trabajas?
-En el Starbucks de aquí dentro
-digo señalando el edificio a nuestras espaldas.
-¿Así conociste este sitio?
-Se podría decir que sí -digo
dubitativa. Pienso en la verdadera historia y en que cuando vi este
pequeño paraíso papá me lo compro para que pudiera disfrutar de él
sin meterme en problemas.
-¿Entonces te apuntas a
natación?
-¿Para qué?
-¿No es obvio?
-Para mí no.
-Así nos veremos más y
pasaremos más tiempo juntos después de las clases.
-Ya, no sé.
-Por favor, me siento muy solo.
-Seguro que muchas de las chicas
solo fingen ahogarse para que intentes salvarlas.
-¿Te das cuenta?
-¿De qué?
-Hace una hora si te hubieran
dicho que me ibas a hablar así los habrías tomado por locos -pienso
en lo que me acaba de decir y tiene toda la razón, puede que pasar
tiempo con Sam me ayude a soltarme un poco y recuperar la confianza
que perdí cuando mamá murió.
-Me apuntaré a natación.
-Genial -dice con una sonrisa
pícara que intenta disimular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario