Mis
manos buscan algo sobre la superficie de mi cama pero no lo
encuentran, abro los ojos y me encuentro sola sobre toda esa maraña
de sábanas. Ya hace más de un mes que Connor volvió con los
cazadores y yo me quedé unos días con mi madre hasta que me
encontré algo mejor pero aún así sigo buscando su silueta junto a
mí. Me levanto con pereza y me pongo unos shorts y mi camiseta de la
universidad de Nueva York. No me doy cuenta de qué día es hoy hasta
que miro el calendario: 13 de agosto, mi cumpleaños a las doce de la
noche seré un As de corazones y podré abrir la carta que mamá me
dio el último día que estuvimos juntas, pero a pesar de que quiero
saber su contenido no la abro sino que la introduzco en mi mochila,
cojo mi longboard y me voy al pasear ya que me toca turno de tarde.
Después de comerme un perrito caliente entro en el Evergreen y Josh
me recibe con un fuerte abrazo.
-¡Felicidades!
-dice sonriente.
-Gracias
Josh -digo con una sonrisa.
-¿Con
quién irás a la fiesta de esta noche? -pregunta curioso.
-Sola
no tengo pareja -digo siendo franca.
-Te
acompañaría con mucho gusto pero voy a llevar a Margaret.
-No
me importa ir sola, de verdad -le digo al ver sus cara de
incredulidad.
-Sabes
hoy ha venido un chico a preguntar por ti.
-Y
claro, no me liarás para que vaya con tu sobrino otra vez.
-Eso
fue una encerrona inocente, pero esta vez lo digo en serio se llamaba
Co... No lo recuerdo bien.
-¿Connor?
-digo esperanzada.
-No,
empezaba por Ca.
-¿Carey?
-pregunto antes de decir el nombre con más posibilidades.
-No
pero se parecía.
-¿Cayden?
-pregunto algo asustada.
-Sí
ese es Cayden, parecía muy agradable dijo algo sobre un puente y que
el color negro era elegante o algo así, no me enteré muy bien
estaba muy ajetreado.
-No
importa gracias igualmente.
Tras
un intenso día me pongo de camino para casa para poder arreglarme
para la fiesta. Cuando subo al metro veo pasar a mi último corazón
por identificar el corazón soñador. Cuando llego a casa me doy una
ducha de agua tibia y me pongo el vestido que tengo en el armario
desde hace meses, lo observo unos minutos antes de ponérmelo, tiene
un escote pronunciado pero hecho a la perfección para que no se vea
nada y sea decente, se ajusta en la cintura y cae por las caderas de
manera bonita. Me pongo unos tacones y me acabo de arreglar con
tranquilidad. Una vez lista cojo la carta y llamo a un taxi, este me
lleva al local donde se celebra la fiesta del decimoquinto
aniversario de Evergreen. Cuando llego veo a muchas caras conocidas
pero ninguna con la que me apetezca empezar una conversación. Así
que me dirijo a la barra y pido una botella de agua.
-Hola
-dice una voz detrás mía. Me doy la vuelta y le veo la cara.
-Ádam
-digo sorprendida- ¿qué haces tú por aquí?
-Bueno
pensé que Nueva York sería divertido.
-Sí
la verdad es que es una pasada, algún día te podría enseñar los
mejores sitios.
-Me
gustaría mucho -dice sonriente- ¿Aimee qué pasó al final con ese
tal Connor?
-Volvió
con los cazadores.
-Lo
sabía, el que nace cazador siempre es cazador.
-Volvió
por mí.
-¿Qué?
¿tú le pediste que se hiciera cazador? No lo entiendo.
-No,
me secuestraron y Connor se entregó para salvarme.
-Oh
-es lo único que sale de su boca.
-Ádam
no me encuentro muy bien creo que me voy a ir a casa.
Busco
a Josh y le digo que no estoy de humor para fiestas y que además me
encuentro mal. Salgo lo más rápido que puedo y una ráfaga de aire
azota mi cara haciendo que se me despeine el pelo pero no le doy
importancia. Como necesito tiempo para estar sola decido ir andando
hasta algún sitio tranquilo. Mientras camino noto las primeras gotas
de lluvia sobre mi piel pero no me importa necesito caminar así que
continuo. Llego a un pequeño puente situado sobre un estanque que no
vi de camino hacia la fiesta en él veo a un muchacho vestido de
traje con un paraguas azul marino. Me quito los zapatos y continuo
andando, al pasar por delante del muchacho bajo la mirada y acelero
el paso.
Es entonces cuando una mano me agarra la muñeca y desliza
sus dedos hasta coger mi mano.
-¿Qué
estás...? -empiezo a decir pero enmudezco al ver a Connor delante
mío.
-Hola
-dice sonriendo pícaramente.
-Connor
-digo sin creérmelo todavía.
-El
mismo -dice aferrándose a mi mano. Sin aguantarme más me acerco a
él y le beso, tarda unos instantes en reaccionar pero después me
besa con pasión.
Sé
que ha tirado el paraguas cuando posa sus manos sobre mi espalda y me
deja encerrada en la mejor de las celdas, sus brazos y su pecho. Se
separa unos centímetros me levanta del suelo y me hace girar en el
aire. La lluvia nos cala hasta los huesos pero no nos importa porque
estamos juntos.
-¿Connor
pero y los cazadores? ¿y Cayden?-pregunto cuando caigo en la cuenta.
-Soy
un As -dice orgulloso- y a Cayden le hice prometer que te dejaría en
paz independientemente de mi elección, además ha resultado ser
mejor persona de lo que me pensaba, él te dijo donde estaría.
-Te
quiero -le susurro a la oreja.
-¿Has
leído la carta de tu madre? -pregunta curioso.
-No,
la tengo en el bolso -digo sacándola de él. Connor recoge el
paraguas y lo pone sobre nuestras cabezas.
Querida
Aimee
Supongo
que siempre te preguntarás que es los que hace que dos personas
se
enamoren. La verdad hija mía es que con un simple roce de un cupido
cualquiera
se puede enamorar. Connor y tú estáis destinados a amaros por mí.
Yo os toqué cuando erais unos críos y a pesar de que intentamos
remediarlo,
no
pudimos, vuestros corazones todavía no estaban decididos y yo los
convertí
en
lo que son, un Dos Corazones. Cariño no luches contra el destino
pues es
imposible
ganar la pelea cuando las cartas están echadas espero de verdad
que
seáis muy felices juntos.
Te
quiere mamá.
-De eso hablé con tu madre esos
veinte minutos en tu casa y esos minutos me hicieron más feliz que
todos los años que pasé entrenando para ser cazador, y ahora
entiendo el por que, tú -dice abrazándome.
-¿Sabes? eres como el rayo de
luz que ilumina mis amaneceres.
-Pues tú eres el relámpago que
en la noche más oscura ilumina mi cielo para indicarme el camino a
casa.
----------------------------------------------------------------------------------------------------
Hello!!!! Bueno eso es todo, nuestros queridos Aimee y Connor son felices para siempre. La verdad es que cuando la acabé me quedé en plan:
Ya que es la primera historia que acabo por completo siempre las dejo a medias porque nadie ni nada me motivaba lo suficiente para continuar pero ahora ya tengo una razón... VOSOTRAS!!! Me habéis dado lo que necesitaba y os lo agradezco de todo corazón
No hay comentarios:
Publicar un comentario