domingo, 27 de octubre de 2013

Capítulo 1.

-Lilly despierta -dice una voz desde la planta baja. Abro los ojos con lentitud pero mi cerebro se niega a dar la orden de levantar todo el cuerpo de la cama. Thomas entra en la habitación y comienza a hacerme cosquillas.
-Ya me levanto -digo jadeando a causa de la falta de aire.
-Hay tostadas y café recién hecho en la cocina -mira la hora en su reloj, su cabello cobrizo cae sobre sus ojos castaños y le da un aire infantil- me voy a la universidad, nos vemos luego y disfruta de tu primer día de clase -dice mientras sale por la puerta.
Después de una rápida ducha de agua fría me pongo una camiseta de un gris oscuro, unos pantalones largos con unas converse negras. Le pego un par de mordiscos a una tostada y un trago al café casi frío que está sobre la encimera. Subo las escaleras y cojo mi mochila mientras me lavo los dientes. Tras una pequeña carrera matutina hasta el instituto para poder llegar a tiempo a la presentación, ante mí se alza la que será mi nueva institución el Lilion East High School.

jueves, 24 de octubre de 2013

Prólogo.

Las primeras gotas de agua comienzan a caer sobre mí pero no me importa continuo caminando con tranquilidad. A mi alrededor veo como todo el mundo comienza a correr a causa de su falta de paraguas. Veo a un muchacho mirando con atención un escaparate y me sorprende que a pesar de que tiene chaqueta, esta no está sobre sus hombros sino que la sostiene en una de sus manos desnudas. Repentinamente gira la cara y me observa unos instantes antes de

sábado, 19 de octubre de 2013

Epílogo

Mis manos buscan algo sobre la superficie de mi cama pero no lo encuentran, abro los ojos y me encuentro sola sobre toda esa maraña de sábanas. Ya hace más de un mes que Connor volvió con los cazadores y yo me quedé unos días con mi madre hasta que me encontré algo mejor pero aún así sigo buscando su silueta junto a mí. Me levanto con pereza y me pongo unos shorts y mi camiseta de la universidad de Nueva York. No me doy cuenta de qué día es hoy hasta que miro el calendario: 13 de agosto, mi cumpleaños a las doce de la noche seré un As de corazones y podré abrir la carta que mamá me dio el último día que estuvimos juntas, pero a pesar de que quiero saber su contenido no la abro sino que la introduzco en mi mochila, cojo mi longboard y me voy al pasear ya que me toca turno de tarde. Después de comerme un perrito caliente entro en el Evergreen y Josh me recibe con un fuerte abrazo.

domingo, 13 de octubre de 2013

Capítulo 10

Reacciono con rapidez e intento huir pero Cayden me coge con un brazo y con su mano libre me tapa la boca para que no pueda gritar, forcejeo todo lo que puedo pero resulta imposible deshacerse de su abrazo.
-Tengo a la chica, ayúdame a meterla en el coche -dice Cayden.
Entonces un hombre alto de unos treinta y pocos se acerca a mí se agacha para cogerme los pies y lo veo claro. Me impulso con el suelo y me respaldo en Cayden para golpearle la cara con las suelas de los zapatos aprovecho el desconcierto del cazador para golpearle en la cara con mi cabeza. Me suelta y se agarra la nariz con las manos, corro lo más rápido que puedo para intentar llegas hasta Connor. Una mano se aferra con fuerza a mi brazo cuando estoy apunto de llegar a una tienda donde me podía refugiar, un pañuelo blanco se posa sobre mi nariz y mi boca, no me hace falta olerlo para saber que es cloroformo. Segundos después todo se torna borroso.

domingo, 6 de octubre de 2013

Capítulo 9

Tras unos interminables veinte minutos la puerta se abre. Veo a Connor pero cuando está a punto de salir por la puerta mamá le agarra el brazo y le susurra algo al oído, Connor asiente un par de veces y se dirige hacia mí.
-¿Qué te ha dicho? -pregunto intrigada.
-Que tenemos que ir a comprar a la costa -dice sonriente, aunque no le creo.
-Está bien, pero antes ¿puedo pasar algo de tiempo con mi madre?
-Claro, está en la cocina creo.
-Gracias.
Me dirijo a la cocina a pasos agigantados y la encuentro frente la encimera con un vaso de agua delante.
-Mamá -me mira sobresaltada y sonríe.
-Pensaba que ibais a comprar -dice. Es entonces cuando me doy cuenta del brillo diamantino en sus ojos.